Índice Contenido
El Templo Romano de Córdoba es una construcción de gran valor histórico situada en pleno corazón de la ciudad. Fue descubierto durante unas excavaciones para la ampliación del ayuntamiento y se trata del único templo romano de la ciudad del que se tiene constancia.
Ubicación del Templo Romano de Córdoba
El Templo Romano de Córdoba está situado al final de la Calle Claudio Marcelo en su intersección con la Calle Capitulares, justo al lado del Ayuntamiento de Córdoba.
Cómo llegar al templo romano
Se puede llegar al templo romano con transporte público, andando o en vehículo privado, aunque el acceso con este último es más complicado debido a la dificultad de encontrar aparcamiento por la zona.
Cómo llegar al templo romano desde la Mezquita de Córdoba: Andando
Cómo llegar al templo romano desde la estación de trenes de RENFE: Autobús
Cómo llegar al templo romano desde el Hotel Córdoba Center: Autobús
Cómo llegar al templo romano desde el Hotel Eurostars Palace: Autobús
Historia del Templo Romano de Córdoba
El templo comenzó su construcción durante el mandato del Emperador Claudio (41-54 d. C.) finalizando en tiempos de Domiciano (81-96 d. C.). Se le dio acceso a agua a través del acueducto Aqua Nova Domitiana Augusta.
El Templo y la plaza que lo rodea, forman parte de un barrio que se construyó entre los siglos I y II d.C. llegando a constituir el foro provincial de la Colonia Patricia, siendo este el título con el que se designó a Córdoba durante la dominación del Imperio Romano. La ciudad se convirtió además en capital de la Bética.
Estructura del Templo Romano de Córdoba
El Templo Romano de Córdoba es un edificio hexástilo, es decir, cuenta con un pórtico con 6 columnas corintias al frente. Éstas miden 9 metros de altura y se encuentran instaladas en un pódium de 3,5 metros por lo que se accedía al templo a través de una escalinata en su extremo oriental. Los laterales estaban rodeados por 10 columnas.
En la actualidad, sólo se mantienen algunos elementos del templo como la cimentación, la escalera, el altar y algunas columnas. Resulta interesante mencionar que los cimientos contaban con una sujeción antérides, sistema que recomendó Vitruvio para evitar el desplazamiento de la construcción por su peso. Esto es evidencia de las grandes dimensiones que tuvo el templo, ya que seguramente fuese visible desde la Vía Augusta que conectaba la ciudad con Roma y que discernía por el este de la ciudad.
El Templo Romano de Córdoba fue construido con diversos materiales, aplicando una base de opus caementicium y añadiendo dispusieron sillares de calcarenita. Por otro lado, las columnas y capiteles fueron esculpidas en mármol blanco, dejando que la plaza superior se edificase con caliza nodulosa violeta. Todos los materiales eran de procedencia local.
Preguntas sobre el Templo Romano de Córdoba
¿Cuándo se construyó el templo romano de Córdoba?
El Templo Romano de Córdoba se construyó en el siglo I d.C. durante el mandato del Emperador Claudio, acabando su elaboración siendo Domiciano el emperador, entre el 81 y el 96 d.C.
¿Cómo se llamaba Córdoba en la época romana?
Córdoba recibió el nombre de Colonia Patricia Corduba tras la refundación del Emperador Augusto, obteniendo además el título de capital de la provincia romana de la Bética.